Una urgencia dental puede surgir en cualquier momento y por ello es muy importante tener siempre a mano el contacto de nuestra clínica odontológica de confianza. Si sientes dolor agudo asociado a problemas bucodentales debes recurrir, en cuanto te sea posible, a la atención temprana.
No obstante, no siempre se tiene acceso a una asistencia personalizada y el tiempo de espera puede resultar más prolongado de lo que deseamos. Por este motivo, te será de gran utilidad conocer los principios básicos de actuación frente a las emergencias dentales.
En este artículo te vamos a proporcionar los conocimientos mínimos necesarios para que puedas enfrentarte a un problema dental de carácter urgente antes de que el dentista pueda atenderte. De ello depende, en muchos casos, que consigas conservar o no una pieza dental. ¡Lee con atención!
Ante las urgencias dentales debemos mantener la calma y seguir unas pautas de actuación muy precisas según las circunstancias acontecidas. Si sufres un accidente dental o un episodio repentino de dolor o inflamación gingival, debes concertar una cita lo antes posible con tu dentista. Mientras esperas la asistencia, intenta mitigar el dolor y las molestias.
Como no es lo mismo sufrir un golpe, un traumatismo o una fractura dental que presentar un sangrado de encías, sentir dolor o inflamación, te vamos a presentar las situaciones más comunes de urgencia dental para que puedas paliar los efectos prioritarios antes de que te asista tu dentista.
Lo primero que debes hacer ante cualquier problema dental es limpiar la zona afectada con enjuagues antisépticos o agua, intentar detener la hemorragia si hubiera sangrado mediante compresión con gasas limpias. Puede ayudar la compresión con una bolsa de té al ser una sustancia muy astringente, tomar algún calmante o antiinflamatorio y aplicar frio en las mejillas.
No obstante, que adquieras conocimientos básicos sobre primeros auxilios bucodentales no te exime de asistir a la consulta odontológica a la mayor brevedad posible. Ante una urgencia dental acude siempre al profesional, las consecuencias y soluciones a tu problema dependen de ello.
El tipo de emergencia dental determina la actuación a aplicar. Por ello, a continuación, te explicamos de forma práctica cómo afrontar las urgencias dentales más habituales. ¡Presta atención!
Aunque no consideres como urgencia la inflamación bucodental, si presentas dolor, irritación, mal sabor de boca y molestias, sí lo es. No pospongas la visita a tu especialista si presentas problemas gingivales.
En la consulta determinarán las causas de tus molestias, calmarán tu malestar y te recomendarán el tratamiento adecuado. Así, minimizarás la infección y evitarás problemas más graves a posteriori.
Aprender a diferenciar una inflamación dental de una infección sin la valoración de un dentista es complejo. No obstante, antes de asistir a la consulta, puedes evidenciar ciertas diferencias y recurrir a algún remedio casero que calme tus molestias durante la espera.
Una infección oral presenta inflamación, dolor y en la gran mayoría de ocasiones supuración, olor desagradable y mucha irritación. Si es tu caso, usa colutorio antiséptico e intenta mantener la boca fresca con enjuagues de agua.
El motivo más habitual del dolor agudo de dientes o muelas es la presencia de caries, aunque también puede deberse a una infección o a problemas motivados por las muelas del juicio.
Antes de que tu dentista te vea y valore tu tratamiento, puedes intentar calmar el dolor: el enjuague bucal con agua tibia y colutorios antisépticos te ayudarán a eliminar las bacterias y a relajar los tejidos afectados. En función de la fase del dolor, el frío puede aumentar o aliviarlo, lo mismo ocurre con el calor. Prueba con ambos y utiliza el que te alivie. También puedes aplicar compresas frías en la zona externa, limpiar las zonas interdentales con hilo aséptico y tomar bebidas y comidas templadas.
Cualquier accidente, golpe o impacto puede provocar que un diente se fracture y segmenta de forma parcial. El daño no es solo estético, la estructura interna de la pieza también puede verse afectada. Por lo que es prioritaria la intervención del dentista para evitar que la pieza se calcifique o necrose.
Si has sufrido un accidente que te haya generado la pérdida de una pieza dental, lo primero que debes hacer es enjuagar suavemente con agua el diente desprendido. Justo después, aplica presión sobre el hueco de la encía para calmar el dolor y contener la hemorragia.
La reposición del diente en el alvéolo debe ser rápida, idealmente antes de los 30 minutos, si no eres capaz de hacerlo por ti mismo busca ayuda inmediata, no demores la reposición del diente aunque esta no sea precisa. Acude a tu dentista con la pieza a la mayor brevedad posible para poder valorar si existen opciones de conservar la pieza original.
Uno de los tratamientos más recurridos y funcionales es la colocación de una corona sobre un implante. Volverás a recuperar tu sonrisa con un buen odontólogo especializado en urgencias e implantología dental.
Si tras un golpe o traumatismo, uno de tus dientes comienza a moverse o parece flojo o menos arraigado, es muy importante que recurras rápidamente a tu dentista de forma urgente. En la clínica, valorarán el estado de la pieza y te explicarán el mejor tratamiento a seguir para tu caso.
Antes de acudir al odontólogo, te recomendamos que no toques demasiado la pieza floja. Intenta no ejercer presión sobre ella con la lengua y evita apretar los dientes.
Una infección oral aguda y localizada puede desencadenar en un absceso dental, que es una acumulación de pus que cursa con dolor. El problema puede afectar a la raíz del diente o a la encía. En cualquiera de los casos, se trata de una urgencia dental. Debes llamar rápido a tu dentista.
Si la zona afectada supura pus, puedes enjuagarte con agua caliente y poner una compresa fría en la mejilla. Detener la infección depende exclusivamente de la actuación de tu odontólogo.
No es nada extraño encontrar en las urgencias odontológicas mordeduras de labio o lengua que precisan una valoración y tratamiento. Morder accidentalmente una parte de la boca es habitual y puede ser muy doloroso.
Una mordedura se produce en circunstancias muy aleatorias, mientras hablas, comes, haces ejercicio o incluso mientras descansas. Si te has mordido, haz presión sobre la herida con una gasa y aplica frío. Si no consigues reducir el sangrado y la herida es importante llamar y pedir cita en consulta.
A veces, se producen incrustaciones de restos o cuerpos extraños en los huecos interdentales. Cuando ocurre, puedes sentir molestias y mucha incomodidad. ¿Cómo actuar? Lo más recomendable es que recurras al hilo dental para intentar liberarte del residuo. Intenta actuar con suavidad para no dañar las encías o los dientes.
Si no eres capaz de extraer el objeto con la seda dental o incluso se te ha clavado más, te desaconsejamos usar objetos punzantes o cortantes y actuar como ante cualquier urgencia dental. Llama a tu dentista.
El uso de aparatos dentales, ya sean móviles o fijos, necesita un proceso de adaptación en el cual es habitual sufrir ciertas molestias. No obstante, si el aparato te provoca heridas o sangrado, acude de urgencias a tu dentista.
Los aparatos pueden provocar irritaciones que precisan de intervención odontológica, como es el ajuste del arco para evitar que los roces acaben haciendo heridas en la zona gingival. Si empiezas a percibir una zona irritada, no esperes y pon cera de ortodoncia que actúe de barrera entre el aparato dental y la mucosa. Luego acude al dentista, te solucionará el problema.
Si el problema se debe a la rotura de una pieza de sujeción del aparato y el alambre se clava en cualquier parte de la cavidad oral, no esperes ni un minuto y pide cita con tu ortodoncista.
Las recomendaciones que te hemos facilitado se ajustan a diferentes situaciones de emergencia, unas de mayor grado de prioridad que otras, pero todas ellas proclives de ser atendidas en clínicas dentales especializadas. Ahora ya sabes cómo actuar ante una urgencia dental, aplica los consejos y acude a tu dentista.
¿No es mejor prevenir que curar? ¿Qué tal si te facilitamos algunas recomendaciones para evitar situaciones como las que te hemos explicado en el anterior epígrafe? En muchas ocasiones podemos evitar una urgencia dental gracias a simples hábitos y precauciones.
Ahora que ya sabes actuar ante una emergencia dental con calma y agilidad, sigue estas indicaciones para prevenir accidentes y evitar imprevistos desagradables.
Una higiene diaria bucodental es básica para preservar la salud oral. Lo ideal es cepillar los dientes varias veces al día, usar un colutorio antiséptico regularmente y utilizar hilo dental para eliminar impurezas de la cavidad interdental.
Con estos hábitos evitarás el exceso de acumulación de placa bacteriana, las infecciones gingivales y muchos problemas periodontales. La prevención es un excelente tratamiento dental.
Si tienes por costumbre utilizar los dientes para romper la cáscara de frutos secos, caramelos y romper o rasgar cosas, desgastar el esmalte de las piezas y aparecerán pequeñas fracturas causantes de sensibilidad y debilidad dental.
El cambio de temperatura brusco entre sustancias frías y calientes provoca que la estructura que conforma el interior de las piezas dentales se inflame y genere hipersensibilidad. Si este problema se prolonga en el tiempo puede causar males mayores.
El exceso de dulces no es beneficioso para la salud en general, pero además es una de las principales causas de caries y de daño dental. Te recomendamos reducir la toma de alimentos con azúcar y realizar un buen lavado bucodental tras su ingesta.
La protección dental es importante a la hora de practicar ejercicio, sobre todo si se trata de actividades de contacto. El riesgo de recibir un golpe o sufrir un traumatismo maxilofacial es alto en este tipo de disciplinas. Si las practicas, te recomendamos utilizar un protector dental para evitar pérdidas o fracturas de piezas.
Para cualquier actividad que suponga un riesgo de impacto, los cinturones, arneses y otros medios de seguridad te servirán de protección frente a posibles impactos y mantendrán tus dientes a salvo.
Ante un problema dental inesperado aplica las recomendaciones que te hemos facilitado y ponte en manos de tu odontólogo en el menor tiempo posible. Las emergencias dentales son prioritarias y solucionarlas a tiempo te ayudará a salvar los dientes dañados y a tratar tu caso de forma rápida y eficaz.
2024 ® Todos los derechos reservados.
Diseño y Programación: DEL86CV.
2024 ® Todos los derechos reservados.
Diseño y Programación: DEL86CV.
2024 ® Todos los derechos reservados
Diseño y Programación: DEL86CV